Detalle de la patente solicitada por Apple sobre un dispositivo de muñeca
Apple tiene ahora mismo un problema. Y se llama iPad. El dispositivo que inauguró una era ha venido perdiendo fuelle en los últimos meses. Cuatro años después de lanzarse la tableta, que ha perdido interés entre los consumidores, los analistas confían en que la posible llegada de un dispositivo electrónico para la muñeca soportar esta reducción de sus ventas.
Las especulaciones acerca de un reloj inteligente no cesan. Y más después de conocerse que la empresa norteamericana ha presentado una solicitud de patente en la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos (USPTO, por sus siglas en inglés) para crear un dispositivo electrónico de muñeca, que podría encajar perfectamente con las especulaciones del rumoreado «smartwatch» de la compañía.
¿Está más cerca el iWatch?
La patente describe un dispositivo con el nombre de «iTime», que tomaría la forma de una pulsera, con una pantalla táctil y configurado para conectarse de forma inalámbrica a un dispositivo móvil como un teléfono inteligente. Pero iría más allá de poder emparejarse a un iPhone o iPad, también lo haría con ordenadores e, incluso, con unas correas especiales que integrarían sensores.
Ante la llegada de un posible dispositivo diferente al ofrecido en su catálogo actual, Apple podría así aspirar a recuperar la cuota de mercado perdida en el segmento de las tabletas. La compañía ha considerado el alto potencial de la tecnología «prêt-à-porter», es decir, integrado en la ropa o accesorios, como gafas, pulseras y relojes inteligentes. Varios fabricantes como Samsung o Sony se han lanzado de lleno desde hace muchos meses a fabricar dispositivos «wearables» -vestibles, en inglés-.
Atendiendo a los rumores y filtraciones vertidas en los últimos meses, este iWatch, que podría presentarse a final de año, vendría en dos versiones distintas en función del tamaño. Un primer modelo optaría por una pantalla de 1.6 pulgadas, mientras que otro sería ligeramente más grande, de 1.8 pulgadas. Este último, a su vez, ofrecería dos versiones, una con pantalla de zafiro, un material que está investigando la compañía para fabricarlo para la pantalla del próximo modelo de teléfono móvil, iPhone 6, y que ya introdujo en el lector de huellas dactilares del iPhone 5S.
Con todo, Apple ha puesto énfasis en el mercado chino, donde ha tenido una gran repercusión. La compañía ha vendido unos 35.2 millones de iPhone entre abril y junio gracias a su impulso fuera de las fronteras norteamericanas. Se ha produdico un aumento del 55% en las ventas en el contexto de las economías emergentes BRIC (Brasil, Rusia, India y China). Por el contrario, las ventas del iPad se redujeron un 9.2% hasta 13.27 millones de unidades.
Tomado de: www.abc.es